4. ¿DÓNDE Y CUÁNDO VIVIÓ JESÚS?
Jesús vivió bajo la ley política del imperio romano
en tiempos delos emperadores Octavio Augusto y de Tiberio en plena
'pax romana'. Pasó la mayos parte de su vida en la región de
Galilea, en los márgenes insignificantes de este Imperio. Se trataba
de una región fértil con una población fundamentalmente rural,
aunque la renovación urbanística que realizó Herodes Antipas, rey
de Galilea, durante la mayor parte de la vida de Jesús, de algunas
ciudades como Séforis o Tiberiades, hizo que una parte de la
población pudiera haber tenido tareas no relacionadas directamente
con la agricultura. Por otra parte, algunos pueblos y ciudades de la
costa del mar de Galilea, como Magdala o Cafarnaún, poseían una
actividad pesquera y de salazón importante. Jesús, por tanto, se
movió entre gente muy heterogénea en razón de las distintas
actividades que les ocupaban. Por otra parte, aunque la población
era mayoritariamente judía, sus fronteras con poblaciones
extranjeras y la antigua ocupación de esa tierra por hombres venidos
de otros pueblos hacía que hubiera una presencia pagana
significativa, quizá no tan numerosa como da a entender el
calificativo de Galilea de los gentiles, nacido en otros momentos de
su historia.
Se trataba de una población con una fuerte conciencia
religiosa que dio origen a varios movimientos de resistencia y
liberación político-religiosa a lo largo de los años en torno a la
vida de Jesús. Sin embargo, los movimientos fariseos o de la
aristocracia sacerdotal no tenían una especial relevancia en esa
zona, pues su influencia radicaba sobre todo en Judea, principalmente
en Jerusalén. Junto con la transmisión familiar de la fe, las
sinagogas, en las que se leía la Ley y se discutía sobre ella, eran
los espacios fundamentales de la configuración socio-religiosa del
pueblo.
Como todo el perímetro mediterráneo, Palestina estaba
controlada por la política romana que ofrecía un orden social
básico permitiendo un desarrollo socio-económico importante y una
vida social sin especiales violencias, a no ser las que aplicaba con
mano de hierro el poder para mantener la dominación. Se trataba, por
tanto, de una paz que se pagaba con gravosos impuestos y al precio
del sometimiento radical. No obstante la vida religiosa judía podía
desarrollarse sin apenas problemas.
Jesús desarrolló su actividad de forma itinerante,
desplazándose por las aldeas y ciudades de Galilea y utilizando
algunas cosas de simpatizantes como centros de su misión. Cafarnaún
parece haber tenido una especial relevancia en este sentido. Su
actividad podría haber durado un año, el 27 o el 28 (después de
Cristo, claro está) según el actual cómputo de la historia, aunque
algunos datos indicarían un ministerio más largo de unos dos o tres
años. En este momento tendría unos 30 años, sin que podamos
precisar exactamente su edad. Después de unos meses en esta zona y
de alguna visita a territorio pagano, se dirigió hacia Jerusalén,
centro simbólico de la identidad judía, para culminar su misión
ofreciendo el Reino allí donde Dios mismo había prometido convocar
finalmente al pueblo para hacerle partícipe de la victoria de su
manifestación final. Algunas ciudades de sus alrededores como
Betania o Efraín le sirvieron de base misionera en esta etapa. Es
posible que subidas previas de Jesús al desierto de Judea para
retirarse en oración, o a Jerusalén para celebrar la Pascua,
hubieran dejado conocidos que después le habrían servido de apoyo
en su misión.
Su muerte se produjo a la misma velocidad que su vida
pública, cuando su actividad en Jerusalén se hizo más relevante y,
por tanto, provocadora. Algunos han calculado que habría muerto el
viernes 7 de abril del año 30, justo antes de Pascua.
(Jesús, el Cristo siempre vivo; Francisco García
Martínez. CCS)
No hay comentarios:
Publicar un comentario